“Cuando somos niños, aprender a hablar representa un gran esfuerzo, pero con la repetición y la práctica, después de cierto tiempo, finalmente lo logramos”. – Dr. Miguel Ruiz / Don José Ruiz
¿Cómo aprender?, pregunta habitual, más aún en la actualidad, en la que métodos sobran para adquirir conocimiento que sea de utilidad.
En esta búsqueda, quisiera alguna vez, recetas mágicas encontrar, que me digan que hay métodos simples, como tronar los dedos, sobar la lámpara mágica, o solo con pestañear.
La diaria realidad me ha ido enseñando, que para aprender, asimilar cualquier tipo de conocimiento, hay que repetir y practicar, hasta que ese esfuerzo persistente, haga que mi mente logre asimilar la novedad.
Lo he podido verificar, observando a un niño aprendiendo a decir mamá, cuanto esfuerzo, diario permanente y constante, requiere para poder si quiera la palabra balbucear.
Para aprender cualquier arte, cualquier oficio, en la escuela, en la universidad, en el trabajo, fórmulas mágicas no hay.
Si quiero aprender a hablar inglés, la primera decisión siempre es querer hacerlo, desarrollar y mantener la voluntad.
Disciplina también, porque se requiere invertir mucho tiempo, en repetir y practicar. Sacrificando los distractores momentáneos. Enfocándome en lo que quiero lograr.
Mi sobrino, Tían, cantante famoso quiere ser, para lograrlo, el primer paso, es atreverse a intentarlo.
El segundo paso, es comprender que no hay fórmulas mágicas, que una fuerza de voluntad férrea diariamente debe desarrollar.
Horas y horas, convertidas en días, meses y años, debe invertir, en repetir y practicar, hasta que logre conseguir la melodía, que sea ambrosía para los oídos del público, al que quiere llegar.
Es un camino diario, a veces desagradable, cuando sienta que la cama lo llama, pero ese fuego, esa pasión que lleva dentro, lo tiene que combinar con fuerza de voluntad, para discernir en que debe invertir su tiempo, para poder su sueño lograr.
Autoconocerse, es un paso que tiene que dar, descubrir dentro de sí, todo lo que tiene para dar, con disciplina y dedicación, si realmente se enfoca y se lo propone, si lo cree, en su interior hallará la fuerza para lograrlo.
En las Sagradas Escrituras, en Eclesiastés 1:9, dice: “No hay nada nuevo bajo el sol”, por lo tanto esto que escribo no lo estoy inventando yo, lo puedes verificar, lo puedes comprobar, la ley de la cosecha se cumple siempre.
Para recoger, primero tengo que sembrar, en este caso el tiempo es un bien incalculable, que debo valorar.
Para reflexionar sobre el tema, te comparto un texto, de unas cuantas, de las tantas enseñanzas de Lee Jun Fan.
Conocido en el mundo por sus películas, pionero de las artes marciales mixtas, Bruce Lee, quien desarrolló una filosofía basada en el aprendizaje y el auto mejoramiento.
“Yo no temo al hombre que ha lanzado 10.000 patadas diferentes, yo temo al hombre que ha lanzado una patada 10.000 veces”
“Pon el foco sobre tu objetivo, practicar la misma patada mil veces, para el caso de las artes marciales, te dará confianza y precisión, cuando lo hagas.
Conseguir la armonía entre el alma y el cuerpo es fundamental, al momento de practicar el Jeet Kune.
Concéntrate, trata de practicar sin artificios, de forma natural, sólo sucede cuando crees en ti mismo, en lo que prácticas, porque practicar y repetir desde dentro, te llevará a encontrar la armonía en ti mismo.
Mantén siempre la humildad, para que puedas aprender.
Rodéate de gente que haya conseguido sus objetivos y fórjate nuevos hábitos.
Empápate de los conocimientos necesarios e invierte tiempo en practicar mil veces, para poder mejorar en lo que quieres lograr.
Cada nuevo día, vacíate por completo de lo que sabías, y empieza nuevamente a practicar y repetir, una nueva y más armoniosa forma encontrarás, de hacerlo.
No te dejes llevar por opiniones, prejuicios, ni predicciones negativas de los demás, sólo dedica tiempo a repetir, practicar y la mejor forma encontrarás de lograr aquello a dónde quieres llegar.
Vacía tu mente, se amorfo, moldeable, como el agua.
Si pones agua en una taza se convierte en la taza. Si pones agua en una botella se convierte en la botella. Si la pones en una tetera se convierte en la tetera. El agua puede fluir o puede golpear.
Cuando se deja caer una piedra en la superficie del agua, esa piedra deja caer una serie de ondas que se expanden hasta abarcar toda la superficie.
Eso es exactamente lo que sucederá cuando convierta mis ideas en acciones reales.
El dinero es algo indirecto, lo directo es tu habilidad o lo que sea que hagas por tu cuenta. Si eso funciona, las cosas indirectas también funcionan.
El verdadero guerrero es aquel que primero ha logrado derrotar su propio temperamento y ponerlo al servicio de sí mismo y de los demás.
Con el fin de controlarme a mí mismo, debo aceptarme a mí mismo por ir con, y no contra, mi naturaleza”
Información tomada y adaptada, de las siguientes fuentes:
https://www.entrepreneur.com/article/399421
https://ecoosfera.com/2017/12/bruce-lee-filosofia-pensamiento-consejos/