“Un negocio es simplemente una idea para mejorar la vida de otras personas.” – Richard Branson

¿qué ES TRABAJAR BAJO PRESIÓN?

Trabajar bajo presión implica realizar tareas o cumplir con responsabilidades laborales en condiciones que generan tensión o estrés debido a la urgencia de los plazos, la complejidad de las tareas o la escasez de recursos. En estos contextos, los individuos deben mantener la calma, tomar decisiones rápidas y efectivas, gestionar el tiempo de manera eficiente y mantener un alto nivel de rendimiento para lograr los objetivos establecidos.

Trabajar bajo presion

Trabajando bajo presión

Hoy día en las búsquedas de empleados que realizan las empresas directamente, o a través de compañías especializadas contratadas para que lo hagan.

Se puede observar que un requisito indispensable para la mayoría de los cargos.

Una característica, competencia o habilidad, que debe poseer la persona para ser contratada, es:

TRABAJAR BAJO PRESIÓN.
Requerimiento al parecer irremplazable también, para los que deciden enfrentar la vida a través de un emprendimiento.
En mi caso particular, esta característica o capacidad no la puse nunca en mi hoja de vida; sin embargo, puedo asegurar que como empleada durante más de 25 años y también en el inicio de un emprendimiento, trabajar bajo presión, lo he vivido en carne propia.

Según el portal https://www.elempleo.com/co/

Trabajo bajo presión se refiere simplemente a que al hacer un trabajo se busca cumplir un indicador, por ejemplo, una cantidad de productos determinada en un plazo concreto, un presupuesto de ventas, la solución a un problema, etc.
No se refiere a tener a alguien presionando o estresando al trabajador, que es la interpretación errada”, explica Juan David Tous, gerente de Comunicaciones de Manpower Group Colombia.”

Sin embargo pienso yo, que en el día a día laboral en la actualidad, dada la situación mundial de volatilidad, incertidumbre, complejidad y ambigüedad, provocada por:

  • Las guerras.
  • La inestabilidad política.
  • Las migraciones.
  • El incremento en los precios de los productos y servicios básicos (inflación).
  • La corrupción en términos generales.
  • La competencia desleal.
  • El desempleo.
  • Los cambios de orden mundial que nos dejó la pandemia.
  • El desarrollo y puesta en marcha de la inteligencia artificial.
  • El incremento de las desigualdades sociales.
  • Lo instantáneo de las noticias.
  • Los cambios de paradigmas humanos, familiares y sociales.

Solo por mencionar algunos.

Saber trabajar bajo presión

«Saber trabajar bajo presión» se refiere a tener la habilidad y la capacidad para mantener la calma, tomar decisiones efectivas y mantener un alto rendimiento en situaciones laborales que implican estrés, plazos ajustados o condiciones difíciles. Implica tener control emocional, habilidades de gestión del tiempo, capacidad para priorizar tareas y adaptabilidad para resolver problemas de manera eficiente en entornos desafiantes.

trabajo bajo presion

¡Estamos trabajando bajo presión!

Porque en un negocio, empresa o emprendimiento, donde confluyen los seres humanos en diferentes roles, con el propósito único de satisfacer sus mutuas necesidades.

Tanto empleados como empleadores y también emprendedores, estamos enfrentados a situaciones externas (amenazas) muy complejas, que escapan a controles y predicciones.
No sabemos y no tenemos forma alguna de saber, qué puede pasar ni en el futuro inmediato, mucho menos en el mediano o largo plazo.

Pienso que así como las empresas necesitan en manos de sus líderes mantener un continuo aprendizaje para adaptarse rápidamente a los cambios y sostenerse en el mercado a través de permanente innovación.

https://www.randstad.es/contenidos360/productividad

  • Frente a la volatilidad: Adaptabilidad:
    Sin dejar de lado la faceta analítica y el esfuerzo por tratar de anticiparse a las condiciones venideras, es prioritaria la capacidad de amoldarse a las condiciones que vengan.
    Hace falta demostrar una visión clara de la organización, especialmente de sus objetivos y valores.
    De este modo, se evitará perder la identidad de la empresa y podrá ser comunicada claramente a clientes e inversores.
    Esto ayudará a marcar una diferenciación con otras empresas.
  • Frente a la incertidumbre: Entendimiento y actualización constante: Informarse, actualizarse y formarse es clave.
    El conocimiento será tu mayor aliado para lograr una mayor sensación de confianza y seguridad.
    Conocer en profundidad las estrategias que la empresa es capaz de llevar a cabo posibilita una respuesta más rápida ante los cambios.
    Además, si se combina con una comprensión del funcionamiento y estado del mercado, se podrá estar preparado y potenciar las fortalezas de la compañía.

  • Frente a la complejidad: Demostrar coraje, transparencia y claridad:
    La situación es difícil de asumir y comprender, pero es necesario que dentro de la organización todo el mundo disponga de toda la información posible para que pueda reinar un ambiente de calma.
    Tiene que demostrar valentía a la hora de afrontar los desafíos.
    Solo tomando decisiones que entrañen peligros se podrá utilizar la ventaja de la incertidumbre y desmarcarse de la competencia.

  • Frente a la ambigüedad: Adaptabilidad, agilidad y capacidad de reacción: Todo puede cambiar en cuestión de días, la organización debe permanecer alerta y tener siempre un plan B bajo la manga.
    La capacidad de improvisar de forma consecuente servirá de mucha ayuda, ya que, en circunstancias como esta, muchas veces no queda otro remedio que recurrir al ensayo-error.
    Se debe apostar por tácticas flexibles, que posibiliten la adaptación rápida sin alterar los objetivos propuestos.
    El liderazgo necesita demostrar que es capaz de desarrollar y poner en práctica múltiples planes de contingencia.

¿Como trabajar bajo presión?

Pienso que para lidiar con el trabajo bajo presión, cumplir con los presupuestos de venta esquivos, disminuir gastos y costos, entre tantos requerimientos que tienen los empleados, las empresas requieren mantener:

  • Una agradable y óptima cultura laboral.
  • Confianza en la capacidad de toma de decisiones de los empleados.
  • Seguimientos permanentes para realizar los cambios que se requieran en los momentos correspondientes.
  • Claridad en las metas, objetivos y estrategias a cumplir.
  • Flexibilidad en la ejecución de las actividades en búsqueda del cumplimiento de las tareas o proyectos asignados.
  • Comunicación de doble vía, clara y transparente.

Los seres humanos en su rol de empleados o emprendedores para trabajar bajo presión y enfrentar los desafíos actuales, requieren más que nunca, buscar mecanismos, maneras y formas para su permanente desarrollo personal, en todas sus dimensiones, como:

  • Capacitación, aprendizaje y actualizaciones permanentes.
  • Aprender y practicar métodos para el control del estrés.
  • No descuidar el desarrollo espiritual.
  • Desarrollar mecanismos para el manejo de la inteligencia emocional.
  • Ejercicio físico y dieta saludable.

Haciéndome recordar que la responsabilidad de ser mejor ser humano, está en las decisiones que cada uno tome, tal como lo dice en su blog el escritor Francisco Alcaide:

“Tu desarrollo personal es tu destino.”

Siendo el desarrollo del ser indispensable para trabajar bajo presión, como lo hacemos, sin duda, todos en la actualidad.

Por esto para mí la frase de Kant, también está más vigente que nunca:

“La inteligencia de un individuo se mide por la cantidad de incertidumbre que es capaz de soportar.”



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